LAS REFLEXIONES DEL SEÑOR LLORENS

Alusiones y límites

La sección de Cartelera Turia Aguas pantanosas parece empeñada en llenar espacio sin ton ni son. La sensación de que quienes escriben no rebaten, ni han leído, ni están bien informados, es tan evidente como improductiva. No vale la pena leer algo tan ramplón. Hace unos meses, a propósito de Magia a la luz de la luna, de Woody Allen, con referencias al Godard de Adiós al lenguaje, antes de que existiera Aguas pantanosas, señalé los graves problemas que conllevan la impostura y la arbitrariedad. Ya tuvimos que soportar aquellas gratuitas aseveraciones de Will Sáez, capaz de asegurar que un film calificado unos diez años atrás en dicha publicación con un (0) era la mar de interesante. La pasada semana, Iris Alcañiz descalificaba Scoop, un sensacional ejercicio de Woody Allen, al tiempo que en otra página aseguraba que Seven, de David Fincher –ver crítica en Cartelera Turia 1.668, calificada con un (1)-, es una excelente película, mientras Dani Gascó redactaba una crítica no menos aventurada de B, de David Ilundain, sin nombrar para nada la obra de teatro original, Ruz-Bárcenas, punto de partida de esta película, que estrenó el Teatro Talía con idénticos protagonistas, Pedro Casablanc y Manolo Solo, cuya crítica apareció en Cartelera Turia 2.676 después de haber sido recomendada en el número 2.674. Diversos lectores y colaboradores con alguna relación con el cine no dan crédito a lo que se dice en muchas críticas, salvo excepciones, y optan por trasladarme su malestar. Y su asombro.

Llevo más de cuarenta años escribiendo críticas y crónicas, y más de medio siglo leyendo Cartelera Turia. Pero tengo la sensación de que muchos no leen ni han leído, ni han visto ni saben ver, ni tienen en cuenta al posible lector, o al cineasta o al autor del guión. Todo, efectivamente, tiene un límite. No sé cuándo podré ver El precio de la fama, pero Xavier Beauvois y sus actores seguro que merecen más atención que la que les ha sido prestada.

ANTONIO LLORENS